URGENTE, INNOVAR EL CUIDADO
DE LOS ADULTOS MAYORES
La
semana pasada decíamos que ningún país del G20 está totalmente preparado para
asegurar entornos saludables, económicamente seguros y socialmente conectados
para los adultos mayores.
La
pandemia de Covid-19 ha dejado al descubierto importantes fisuras en el sistema
de cuidados.
¿Cuántos
de nosotros conocemos a alguien mayor, vulnerable y confinado en casa, aislado
de los servicios sociales y de la interacción humana básica?
¿O
un adulto mayor que vive con un cuidador que está expuesto regularmente al
virus?
La
tarea de encontrar soluciones nuevas y asequibles para apoyar a los adultos
mayores y a sus cuidadores puede haber adquirido una nueva urgencia en los
últimos meses, pero no es un problema nuevo.
Sobre
eso escriben Renee Wittemyer y Jason Towns, en Inc, en donde señalan que, en
EUA, en 2018, hubo más inversiones de capital privado en empresas que se ocupan
de mascotas que en empresas que se ocupan de las personas a medida que envejecen.
Eso es una gran falla del mercado.
En
EUA cuidar a los adultos mayores es una oportunidad de 131 mil millones de
dólares, el equivalente al mercado de la industria global del juego.
La
pandemia ha dejado en claro que necesitamos nuevas soluciones a la crisis del
cuidado de personas. En EUA hay datos más precisos sobre el número de personas
(48 millones de personas, en su mayoría mujeres) que cuidan a otro adulto.
En
México gracias al Instituto Belisario Domínguez, y a este estudio, coordinado
por Lucía Pérez Fragoso, sabemos que 33.7% de la población en México es
dependiente, sin considerar a quienes viven con alguna discapacidad y tienen
entre 14 y 65 años de edad.
Pero
aún nos falta conocer cuántos de esos dependientes lo son por cuestiones de
salud.
Sabemos
que la mayoría de los cuidadores consideran que esa responsabilidad es una
forma de expresar amor mutuo.
Pero,
para muchos, ese trabajo también puede ser agotador desde el punto de vista
emocional, económico e incluso físico.
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