GOLD STANDARD PARA TRATAMIENTO DE PIE EQUINO VARO INFANTIL

*Diez niños podrían superarlo por la alianza BSN medical y la Fundación Mexicana del Pie Equino Varo AC

*Mediante manipulaciones y correcciones progresivas con yesos como el yeso de París y de una férula de abducción, se puede corregir esta deformación congénita y erradicar la discapacidad que genera

A fin de apoyar el tratamiento de diez niños de escasos recursos con pie equino varo aducto (PEVA), mal formación congénita que afecta a nivel mundial a cien mil niños por año, BSN medical firmó una alianza con la Fundación Mexicana del Pie Equino Varo A.C., a través de la cual se donarán los yesos de París, Gypsona, necesarios para su tratamiento con el método Ponseti.

“En BSN medical estamos comprometidos con el desarrollo de productos innovadores con tecnología de punta para proveer de soluciones eficaces y seguras a los profesionales médicos y contribuir a preservar y recuperar la salud en los pacientes. Es por ello que estamos seguros que esta donación amplificará el alcance de la Fundación, para mejorar la calidad de vida de más niños en México”, señaló Daniel Amezcua, director general de BSN medical.

METODO PONSEI, TRATAMIENTO EFICAZ

Al respecto, el doctor José Gilberto Ríos, ortopedista pediatra y vicepresidente de la Asociación Internacional Ponseti México, explicó que “en México, cada año nacen aproximadamente cinco mil niños con PEVA, también conocido como pie zambo. Esta deformación recibe su nombre dadas sus características: pies rotados hacia adentro (varo), incapaces de apoyar el talón”.

El especialista agregó que, anteriormente, el campo médico usaba como primer tratamiento la cirugía posteromedial, que consistía en un corte desde el dedo gordo hasta el talón, con el que se liberaban los ligamentos, articulaciones y tendones que condicionan al pie a mantener una posición hacia dentro.

Sin embargo, en 1963, el doctor Ignacio Ponseti publicó el método que lleva su nombre y que tiene la ventaja de ser un procedimiento no invasivo, y que permite a los pacientes, en el largo plazo, gozar de pies más flexibles y con menos dolor.

El Método Ponseti se basa en la aplicación de yesos de París alrededor del pie del menor, para corregir gradualmente su postura dirigiéndolo hacia afuera en un periodo promedio de seis a ocho semanas. Posteriormente se realiza una microcirugía a través de la piel, que se puede efectuar en el consultorio con anestesia local, para liberar el tendón de Aquiles (tenotomía).

El especialista, quien desde hace 13 años utiliza este método, destacó el rol que juega el yeso de París para garantizar buenos resultados.

“Permite esculpir el pie y moldearlo con rigidez, sin ser incómodo para el menor. Aunque existen otros materiales como la fibra de vidrio o softcast para sujetar, es necesario precisar que está comprobado, dentro del campo médico, que el yeso de París garantiza mejores correcciones”, precisó.

Después de tres semanas de la tenotomía, el tratamiento concluye con el uso de una férula de abducción que consiste en un par de zapatos tipo bota, unidos por medio de una barra. Su principal función es mantener durante el día y la noche, la posición de los pies, ya corregidos con la manipulación y la colocación de yesos por los médicos capacitados en el método Ponseti, y su uso debe prolongarse hasta los cinco años de edad.

“Está demostrado que, cuando no se brinda el seguimiento adecuado al paciente, el 80% de los niños tratados puede desarrollar de nuevo la deformidad”, advirtió.

Por su parte, Magdalena García-Torres Aguilar, fundadora y presidenta de la Fundación Mexicana del Pie Equino Varo A.C., comenta que, desde su inicio en 2011, la principal misión de la institución ha sido difundir el padecimiento y su tratamiento, ayudar a canalizar a los niños con este padecimiento a hospitales públicos donde hay “Centros Especializados Ponseti” en los cuales laboran médicos ortopedistas pediatras capacitados y proporcionar los medios económicos a los padres para que los pequeños reciban el tratamiento y, sobre todo, adquieran sus férulas. Estas acciones han beneficiado a mil 881 niños en condiciones de vulnerabilidad económica en varias entidades del país.