LA LENGUA Y EL SINDROME DE LA BOCA ARDIENTE

 

 

La lengua tiene cerca de diez mil papilas gustativas conectadas al cerebro por fibras nerviosas. Las señales que crean los alimentos son enviados al cerebro, donde se interpretan sabores.

¿Cuáles son los sabores más sensibles para tu lengua? Ciertas áreas de la lengua son más sensibles a ciertos sabores, como amargo, ácido, dulce o salado.

Muchas veces, las sensaciones de sabor son una mezcla de estas cualidades. Las lesiones en la lengua son la causa más frecuente de molestias en la lengua. La lengua tiene muchas terminaciones nerviosas para el dolor y el tacto, y es más sensible que otras partes del cuerpo.

Morderse la lengua accidentalmente es relativamente frecuente, pero las lesiones producidas de este modo suelen curarse con rapidez.

Tanto un empaste fracturado como una pieza dental cortante y rota pueden causar daños considerables a este delicado tejido.

Las lesiones penetrantes (como los disparos y las puñaladas) y las lesiones por golpes contundentes dañan la cara y la lengua (véase Lesiones faciales). Las lesiones superficiales se curan bastante rápidamente y las más profundas por lo general no persisten más de 3 semanas.

Cuando se trata una laceración lingual (de la lengua), los médicos deben decidir si realmente se necesitan puntos de sutura, ya que muchas lesiones se curan rápidamente sin reparación y muchas personas no pueden mantener la boca abierta y la lengua inmóvil durante la sutura, por lo que requieren sedación o anestesia.

El síndrome de la boca ardiente probablemente representa una serie de trastornos diferentes con diferentes causas, pero con un síntoma común.

Es posible que la totalidad de la boca o sólo la lengua se vean afectadas por una sensación de ardor, hormigueo o entumecimiento, que puede ser continuada o intermitente.

El diagnóstico del síndrome de la boca ardiente se basa en los síntomas que presenta la persona y en la ausencia de otras causas más habituales de molestias en la lengua. Se trata cualquier causa subyacente.

Mantener la boca húmeda a menudo ayuda a aliviar la sensación de ardor. El síndrome de la boca ardiente aparece con mayor frecuencia en mujeres post-menopáusicas.

El síndrome de la boca ardiente no es lo mismo que el malestar temporal que muchas personas experimentan después de comer alimentos irritantes o ácidos.