LISTOS PARA PREVENIR LA INFLUENZA QUE YA ESTÁ MUY CERCA

*Los virus A y B que la causan, aparecen especialmente en los meses fríos y en cualquier parte del mundo

*Se debe prestar atención a los síntomas antes de que aparezca la enfermedad por contagio

La influenza es una enfermedad respiratoria, muy contagiosa, provocada por los virus A, B y C de la influenza; de éstos los virus A y B son los más agresivos, potencialmente graves y son capaces de causar epidemias y provocar la muerte de la población afectada.

Esta enfermedad se distribuye mundialmente durante todo el año, sobre todo en los meses del invierno, de acuerdo a la estacionalidad de cada continente.

“En el caso de México, se considera como periodo de riesgo de influenza desde octubre hasta abril de cada año, pues en estos meses se da con mayor frecuencia la presencia de temperaturas bajas”, explicó la doctora María del Socorro Ortiz Gea, especialista en Pediatría del Centro Médico Coyoacán.

El virus de la influenza provoca esta enfermedad respiratoria contagiosa y afecta principalmente a la nariz, la garganta, los bronquios y, ocasionalmente, los pulmones.

“El virus se transmite con facilidad de una persona a otra porque la transmisión se da de persona a persona mediante las gotitas de saliva producidas al toser o estornudar, las cuales al ser inhaladas se adhieren en el epitelio de las vías respiratorias o bien, por contacto con manos o superficies contaminadas”, añadió la especialista.

Se considera como periodo de incubación desde la exposición hasta el inicio de la enfermedad y varía de 1 a 4 días dependiendo de la magnitud de la dosis viral y del estado inmune de la persona.

El periodo infeccioso se debe a la diseminación del virus y comienza un día antes de la aparición de los síntomas, llega al máximo en 24 horas, se mantiene durante 1 ó 2 días y declina con rapidez.

“La persona infectada por el virus, puede contagiar a otra antes de saber que está enfermo y también mientras lo está. La mayoría de los adultos puede contagiar a otros a partir de un día antes de que los síntomas se desarrollen y hasta 5 a 7 días o más, después del inicio de la enfermedad. Algunas personas, en especial los niños y las personas con sistemas inmunitarios debilitados, podrían causar contagios por un tiempo más prolongado”, precisó la doctora Ortiz Gea.

SINTOMAS

“Los principales síntomas de la influenza son: temperatura de 39 a 40 grados centígrados, tos, dolor de garganta, nariz tapada, fuertes dolores musculares y corporales, dolor de cabeza y fatiga”, explicó la doctora.

A pregunta específica sobre si ¿es posible prevenir la influenza?, respondió que la forma más eficaz de prevenir la enfermedad y sus consecuencias graves es la vacunación.

Todos estamos expuestos al riesgo de contagiarnos con influenza, pero en algunas personas la enfermedad puede ser más grave.

Señaló la especialista que los grupos prioritarios para aplicarse la vacuna, son los niños desde los 6 meses a los 2 y medio años, personas mayores de 50 años de edad, mujeres embarazadas en temporada de influenza; adultos y niños con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y asma; adultos y niños con enfermedades cardiacas, diabetes, inmunodeprimidos, cuidadoras de niños, doctores, residentes de asilos, personas con problemas hematológicos, VIH, y toda persona que desee disminuir el riesgo de ser infectado por la influenza.

Actualmente se utilizan principalmente vacunas trivalente y tetravalente. La trivalente contiene dos cepas de influenza tipo A (H1N1, H3N2) y una cepa de influenza B. Es de aplicación anual ya que su elaboración varía año con año, debido a los cambios antigénicos de los virus. La tetravalente ha sido diseñada para proteger contra cuatro virus de la influenza

Otras recomendaciones importantes son el lavado de manos adecuado y frecuente, evitar el contacto directo con las personas que estén enfermas, evitar tocarse la nariz, la boca y los ojos y practicar otros buenos hábitos de salud como limpiar y desinfectar las superficies de contacto más comunes en el hogar, en el trabajo o en la escuela, especialmente cuando alguien está enfermo.

Dormir bien, mantenerse activo físicamente, controlar el estrés, beber mucho líquido y comer alimentos nutritivos.

“Evidentemente hay tratamiento para la influenza con medicamentos antivirales, que se usan para tratar esta enfermedad”, concluyó la doctora Ortiz Gea.