jueves, 14 de julio de 2016


Enjuagues bucales: alcohol vs no alcohol


*Ayudan a eliminar bacterias, microorganismos y aliento desagradable


Por lo general y como costumbre, después del cepillado de los dientes se recurre al enjuague bucal, que es una solución que mantiene la higiene, ayuda a eliminar las bacterias y microorganismos causantes de caries y a eliminar el aliento desagradable.
Es el complemento recomendado por los especialistas para brindar una limpieza más profunda además de dejar una sensación de frescura por más tiempo.
Existe una gran variedad de colutorios o enjuagues bucales que se adecuan a las necesidades de cada consumidor dentro de los cuales están los que contienen alcohol y aquellos que no lo tienen.
El alcohol es un elemento que aporta la función antiséptica de dichos productos, además de ayudar a la conservación de los componentes de la fórmula, pero en muchos casos propicia una experiencia dolorosa y poco placentera durante su uso, debido a su efecto cáustico y astringente.
Puede ser que aquellas personas que presenten heridas o alta sensibilidad en las mucosas de encías, paredes de la boca, debajo de la lengua y paladar, experimenten una sensación de ardor y la posibilidad de agravar la lesión.
También pueden originar que se escalde la lengua, situación que puede disminuir el tiempo que se sugiere retenerlo en la boca antes de escupirlo.
Las consecuencias que pueden presentarse al utilizar colutorios con alcohol son múltiples, pero la más importante es la sequedad bucal o xerostomía, debido a que se modifica la cantidad y calidad de la saliva, por lo cual aumenta la probabilidad de provocar enfermedad de las encías y caries dentales.
Por otro lado, se recomienda evitar el uso de dichos productos en niños ya que en edades tempranas de la infancia, éstos pueden tragarse accidentalmente el enjuague e intoxicarse debido a la ingesta de flúor mayor a la indicada ocasionando malformaciones en los dientes.
El enjuague bucal sin alcohol cuenta con los mismos elementos para prevenir la caries, placa bacteriana y eliminar restos de alimento que los que tienen alcohol, además, pueden utilizarse con mayor tranquilidad sin temor a irritar la boca.
Asimismo, son aptos para personas que padezcan de encías sensibles, salvo contraindicación del odontólogo, al no presentar dicha sustancia.
Por esta razón, la Asociación Dental Mexicana recomienda usar un enjuague bucal, de preferencia libre de alcohol, como una herramienta para evitar el mal aliento, una opción viable es Astringosol que desde hace más de 30 años ha estado presente en el mercado mexicano a través de una vasta variedad de productos, libres de alcohol, para atender las necesidades de cada persona.
Además de eliminar hasta el 90% de bacterias causantes del mal aliento, brinda un aliento fresco y contiene un mineral activo fortalecedor que se une al esmalte dental, para ayudar a proteger las áreas que más lo necesitan.



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