PROMOVER VACUNACIÓN EN LOS ADULTOS

PARA UN ENVEJECIMIENTO SALUDABLE

*Solo cuatro de cada 10 mexicanos entre 20 y 69 años de edad se vacunan

*Primer Consenso Mexicano de Vacunación en el Adulto Mayor

“La vacunación no corresponde únicamente a la etapa de la niñez”, manifestó Luis Miguel Gutiérrez Robledo, director general del Instituto Nacional de Geriatría (Inger), en la presentación del Primer Consenso Mexicano del Adulto.

Destacó que es necesario promover la cultura de vacunación entre los adultos, para que lleguen a la tercera edad Añadió que solamente a través de la información, y educación se logrará que la población conciba esta razón.

No obstante que México cuenta con uno de los mejores esquemas de vacunación infantil, cuya cobertura es superior al 90%, entre los adultos la inmunización es menor.

Prueba de ello es que el 60% de las personas entre los 20 y 59 años de edad no cuenta con un esquema de vacunación completo. Solamente cuatro de cada diez mexicanos en ese rango de edad se vacunan.

Es por ello que, como parte de las iniciativas del Primer Consenso Mexicano de Vacunación en el Adulto, es fundamental diseñar una cartilla que dure toda la vida.

Las enfermedades más importantes que se revisaron en este consenso son ocho: tosferina, difteria, tétanos, hepatitis B, herpes zoster, influenza, neumococo y el virus del papiloma humano (VPH).

En este contexto invitó a los profesionales de la salud a ser los encargados de propiciar y promover el uso de la vacuna en la consulta diaria.

En noviembre de 2014 el Inger organizó una reunión conjunta entre Francia y México en la cual se tomó el acuerdo de optimizar los esquemas de vacunación vigentes para lograr una mejor calidad de vida de la población, sobre todo los adultos mayores.

Al respecto, la doctora Martha Cecilia Guerrero, especialista en enfermedades infecciosas del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, reconoció que con esta iniciativa se lograrán menos complicaciones y hospitalizaciones, así como reducir el uso de antibióticos y preservar la capacidad funcional.

Destacó que igualmente permitirá maximizar a los beneficios de los programas de vacunación en la población, el ahorro económico en consultas, medicamentos, hospitalización, discapacidad y pérdidas de días laborables.

“Tenemos que incidir en todas las edades de la vida para propiciar esta inmunidad que protege a toda la población”, concluyó.