QUINCE REGIONES DE ADN HUMANO VINCULADAS CON LA DEPRESION
*Muchas están localizadas cerca de
genes involucrados en el desarrollo del cerebro, aseguran los investigadores
Un grupo de investigadores afirman haber identificado 15 regiones del ADN
humano asociadas con la depresión; destacan que éstas podrían contener genes
que aumentan el riesgo de depresión, aunque el estudio no probó que esos genes
provoquen la depresión.
"Identificar genes que afectan el riesgo de una enfermedad es el
primer paso para comprender la biología de la enfermedad en sí, lo que nos
ofrece objetivos para orientar el desarrollo de nuevos tratamientos",
afirmó el doctor Roy Perlis, autor del estudio y miembro del Centro de
Investigación en Genética Humana del Hospital General de Massachusetts, en
Boston.
"En términos más generales, hallar genes asociados con la depresión
podría ayudar a clarificar que se trata de una enfermedad del cerebro, lo que
esperamos que reduzca el estigma asociado con esos tipos de enfermedades",
planteó en un comunicado de prensa del hospital.
Los investigadores analizaron datos de más de 300 mil personas de
ascendencia europea, que fueron recolectados por 23andMe, una compañía que crea
perfiles genéticos para los consumidores.
Más de 75 mil de las personas del estudio habían sido diagnosticadas con
depresión o tratadas por la afección.
El análisis precisó 15 regiones del ADN, incluyendo 17 sitios específicos,
asociadas de forma significativa con el riesgo de depresión.
Varios de esos sitios se localizan en o cerca de genes que se sabe que
tienen que ver con el desarrollo del cerebro.
"Los modelos basados en los neurotransmisores que usamos ahora para
tratar la depresión tienen más de 40 años de antigüedad, y de verdad
necesitamos nuevos objetivos para los tratamientos. Esperamos que el hallazgo
de estos genes nos oriente hacia estrategias novedosas de tratamiento",
comentó Perlis, que también es profesor asociado de psiquiatría de la Facultad
de Medicina de la Universidad de Harvard.
"Otro mensaje clave del estudio es que la forma tradicional de
realizar estudios genéticos no es la única que funciona. Usar conjuntos grandes
de datos existentes o biobancos podría ser mucho más eficiente, y quizá ser
útil para otros trastornos psiquiátricos, como los trastornos de ansiedad, en
que los métodos tradicionales no han resultado exitosos", planteó Perlis.
El estudio aparece en la edición en línea del 1 de agosto de la revista
Nature Genetics.
No hay comentarios:
Publicar un comentario