ENCUESTA NACIONAL MUESTRA
QUE LA CIUDADANÍA
ESTÁ A FAVOR DE AUMENTAR
IMPUESTO AL TABACO
*Incrementar en 50% los precios de los
cigarros evitaría 49 mil 400 muertes prematuras y 259 mil casos nuevos de
enfermedad
En
conferencia de prensa organizaciones sociales y la empresa Dinamia presentaron
los resultados de la Encuesta Nacional sobre el Aumento de Impuesto al Tabaco
aplicada a ciudadanas y ciudadanos de México, la cual refleja la aceptación del
impuesto al tabaco en el país.
Participaron
Erick Antonio Ochoa, director de Salud Justa Mx, Omar Gutiérrez Bayardi,
director de Dinamia, Belén Sáenz de Miera Juárez, investigadora de la
Universidad Autónoma de Baja California Sur y asesora económica de Salud Justa
Mx, Eduardo del Castillo Valadez, director de CÓDICE y Adriana Rocha Camarena,
directora de Sociedad Civil y Asuntos Legislativos en Polithink.
Omar
Gutiérrez Bayardi, señaló que “… el 77% de las personas entrevistadas
declararon estar de acuerdo con que se aumente el impuesto a los cigarros para
prevenir su consumo y proteger la salud. Llama la atención que incluso la
población que se declaró como fumadora actual (33% de la muestra) estuvo en un
72% de acuerdo con el aumento de impuestos. El 46% de los fumadores también
aceptó que su consumo cuando el precio de los cigarros aumenta. La encuesta,
que constó de 800 entrevistas, con nivel de confianza del 95% y margen de error
máximo de estimación de +/-3.46%, se levantó con cobertura nacional
directamente en los hogares de los entrevistados. Las entrevistas se aplicaron
entre el 3 y el 12 de junio de 2022”.
“El
informe más reciente sobre el control del tabaco en la Región de las Américas
2022 reconoce el gran esfuerzo hecho en México, desde la Presidencia de la
República y el Congreso de la Unión hasta la sociedad civil, para abatir
rezagos históricos en la lucha contra el tabaquismo. Gracias a ello, hoy por
hoy somos uno de los siete países en el continente que cuenta con cuatro de
seis medidas fundamentales para el control del tabaco, incluyendo ambientes
libres de humo y prohibición total de publicidad, promoción y patrocinio”, dijo
Erick Antonio Ochoa, director de Salud Justa Mx.
“Sin
embargo, uno de los temas pendientes son los impuestos al tabaco, que no
alcanzan el mínimo recomendado por la Organización Mundial de Salud: que los
impuestos representen el 75% del precio de venta final o el 70% de impuesto
específico. Acá hay un tema fundamental en la agenda por resolver”, precisó.
Por
su parte Belén Sáenz de Miera investigadora de la Universidad Autónoma de Baja
California Sur y asesora económica de Salud Justa Mx resaltó: “México se había
comprometido a reducir la prevalencia de fumadores a menos de 13% en 2025, pero
sigue estancado en los niveles de 2009 (alrededor de 17%): es claro que esa
meta no podrá cumplirse. Si queremos retomar la tendencia decreciente que tuvo
a inicios de la década de 2000, es indispensable un incremento sustancial del
impuesto al tabaco. El incremento de los precios de los cigarros de 50%, en la
próxima década: podría evitar 49 mil 400 muertes prematuras y 259 mil casos
nuevos de enfermedad. Además, generaría beneficios económicos hasta por 310 mil
millones de pesos. Los mayores beneficios serían para el 20% de la población
más pobre”.
Eduardo
del Castillo, director de Códice, señaló que “Es benéfico para la población,
sobre todo para aquella de menores recursos, que los impuestos generales no
sean incrementados, toda vez que ello les protege contra un mayor descenso de
su nivel de vida. Eso ha señalado el presidente Andrés Manuel López Obrador,
quien propuso esa política desde su campaña a la presidencia. No obstante, toda
regla tiene una excepción y ese es el caso de los imprescindibles impuestos a
los productos del tabaco, toda vez que incrementar ese impuesto contribuye a
que niñas y niños, así como los adolescentes, se alejen del tabaquismo por su
inaccesibilidad. Es un impuesto excepcional en favor de la salud y así lo debe
considerarlo el primer mandatario”.
Para
finalizar, Adriana Rocha Camarena, directora de Sociedad Civil y Asuntos
legislativos en Polithink concluyó “dentro de las políticas para el control del
tabaco, los impuestos a ese producto son a lo que más teme la industria
tabacalera, pues es la política más efectiva y la que le pega directamente a sus
ganancias. Por esta razón, pone un especial esfuerzo en desacreditarlos. Hablan
las tabacaleras del contrabando y de la ilegalidad, como si fuera algo ajeno a
ellos, cuando son cómplices; utilizan datos que no son comprobables ni
verificables. Si el contrabando de cigarros fuera del tamaño que asegura la
industria, no sería negocio vender tabaco en México., Los impuestos al tabaco
sólo benefician a la población”.