VAPEAR, HABITO DE ALTO
RIESGO DE CONTAGIO POR COVID-19
*El domingo 31 de mayo se celebra el Día
Mundial sin Tabaco
Mucho
se ha hablado de que el método de vapeo es dañino para la salud; sin embargo,
hoy más que nunca debemos tener en cuenta que las personas que fuman y/o vapean
tienen un riesgo mayor de un mayor daño en caso de contagio del COVID-19,
debido a la afectación respiratoria prexistente derivada de estos malos
hábitos.
De
acuerdo con el doctor Eric Bernicker, médico oncólogo torácico del Hospital
Houston Methodist, hoy en día, “existe una gran preocupación en términos del
virus COVID-19 en las personas que vapean. Hay una tremenda cobertura en las
noticias, y algunos de los datos en China y Europa sugieren de manera
significativa que los fumadores tienen más probabilidades de enfermarse y, si
se enfermaron, tienen más probabilidades de morir por el virus que los no
fumadores.”
Agregó
que desde antes de la pandemia se tenían ya informes acerca del daño que
produce vapear y “sabemos que muchas personas estaban vapeando con componentes
modificados los cuales causan una reacción dañina a los pulmones, incluso
sabemos que las personas que solo vapean nicotina pueden presentar un aumento
de las exacerbaciones del asma y puede incluso, haber daño al tracto
respiratorio superior”.
“Por
lo que, cuando se tiene un virus como COVID-19 que tiene la capacidad de atacar
de manera muy agresiva e ingresar a las células pulmonares y al sistema respiratorio
bajo, es una muy mala idea continuar vapeando, y por lo común que se ha vuelto
esta práctica, nos seguirá preocupando y ahora con mayor razón ante la pandemia
que vivimos”, añadió.
PAUSA
PARA PENSAR
Ante
la resistencia de muchas personas para dejar de vapear bajo la premisa de que
es menos dañino que el cigarro tradicional, el especialista del Hospital
Houston Methodist hizo un llamado para “mientras continúa la discusión, si
alguien es un gran fumador de cigarrillos e intenta dejarlo y simplemente no
puede, usar cigarrillos electrónicos no es la estrategia razonable ya que no
hay pruebas de que ese cambio sea exitoso y muchas personas vuelven a consumir
tabaco a los meses o años de vapear y continúan enfermando”.
En
términos de exhortación para adolescentes o adultos jóvenes, que no han fumado
tabaco y que toman el vaporizador como un hábito, recomendamos encarecidamente
que se detengan y hagan todo lo posible para dejar los cigarrillos
electrónicos.
El
doctor Bernicker agregó que cuando se es joven “pensar que nada puede hacerte
daño es algo muy común, pero creo que es muy razonable tomar medidas tanto para
minimizar las posibilidades de contagio por COVID-19, y evitar los vapeadores
ya que está probado que también pueden dañar los pulmones y es más probable que
las personas que vapean lleguen con síntomas respiratorios más acentuados en
caso de infectarse con coronavirus. Por lo que la pandemia, sin el afán de ser
alarmista, es otra razón para que las personas piensen firmemente en dejar de
vapear y/o dejar el tabaco”.