4 DE JUNIO: DIA MUNDIAL DE LUCHA
CONTRA LA OBESIDAD
La
obesidad es un problema de salud global y su importancia radica en que no es
simplemente una cuestión de "kilos de más" o de estética, sino una
enfermedad crónica y compleja que tiene un impacto profundo y multifacético en
la salud de una persona, afectando prácticamente todos los sistemas del cuerpo.
Es
una epidemia global con consecuencias devastadoras.
· Prevalencia
en aumento: La obesidad ha alcanzado proporciones epidémicas a nivel
mundial, afectando a miles de millones de personas. México, lamentablemente,
ocupa uno de los primeros lugares a nivel global en obesidad infantil y de
adultos.
· Reducción
de la esperanza de vida: Se estima que la obesidad puede reducir la esperanza
de vida en al menos 10 años, debido a las múltiples comorbilidades que acarrea.
Costo
socioeconómico: La obesidad impone una carga económica enorme a los
sistemas de salud debido a los costos asociados con el tratamiento de las
enfermedades relacionadas. También afecta la productividad laboral y la calidad
de vida en general.
No
es sólo lo que comes: Factores poco conocidos que influyen en la obesidad. Aunque
la dieta y el ejercicio son fundamentales, hay otros factores que a menudo se
subestiman:
·
Genética: La predisposición genética juega un papel importante. No todas las
personas tienen la misma facilidad para ganar peso o la misma capacidad para
perderlo, incluso con dietas similares.
·
Factores hormonales: Desequilibrios hormonales, como los relacionados con la
tiroides o el síndrome de ovario poliquístico, pueden influir.
·
Sueño: La falta crónica de sueño altera las hormonas reguladoras del apetito
(leptina y grelina), lo que puede llevar a un aumento de la ingesta calórica y
al aumento de peso.
·
Estrés y emociones: El estrés crónico y las emociones negativas pueden llevar a
comer en exceso como mecanismo de afrontamiento, lo que se conoce como
"comer emocional".
·
Medicamentos: Algunos medicamentos (antidepresivos, corticoides, etc.) pueden
tener como efecto secundario el aumento de peso.
·
Disruptores endocrinos: Ciertos químicos presentes en el medio ambiente
(pesticidas, plásticos) pueden actuar como "obesógenos", alterando el
metabolismo y promoviendo el almacenamiento de grasa.
Microbiota intestinal: La composición de las
bacterias en el intestino grueso (microbiota) puede influir en la forma en que
el cuerpo absorbe nutrientes y almacena grasa.
En
resumen, la importancia de la obesidad radica en su complejidad como
enfermedad, su papel central en el desarrollo de numerosas afecciones crónicas
y su impacto devastador en la salud individual y pública a nivel global.
Abordarla requiere un enfoque integral que vaya más allá de la simple dieta y
el ejercicio, considerando todos los factores que contribuyen a su desarrollo.

No hay comentarios:
Publicar un comentario