miércoles, 4 de junio de 2025

 

4 DE JUNIO: DIA MUNDIAL DE LUCHA

 CONTRA LA OBESIDAD

 


 

La obesidad es un problema de salud global y su importancia radica en que no es simplemente una cuestión de "kilos de más" o de estética, sino una enfermedad crónica y compleja que tiene un impacto profundo y multifacético en la salud de una persona, afectando prácticamente todos los sistemas del cuerpo.

   Es una epidemia global con consecuencias devastadoras.

   · Prevalencia en aumento: La obesidad ha alcanzado proporciones epidémicas a nivel mundial, afectando a miles de millones de personas. México, lamentablemente, ocupa uno de los primeros lugares a nivel global en obesidad infantil y de adultos.

   · Reducción de la esperanza de vida: Se estima que la obesidad puede reducir la esperanza de vida en al menos 10 años, debido a las múltiples comorbilidades que acarrea.

     Costo socioeconómico: La obesidad impone una carga económica enorme a los sistemas de salud debido a los costos asociados con el tratamiento de las enfermedades relacionadas. También afecta la productividad laboral y la calidad de vida en general.

     No es sólo lo que comes: Factores poco conocidos que influyen en la obesidad. Aunque la dieta y el ejercicio son fundamentales, hay otros factores que a menudo se subestiman:

· Genética: La predisposición genética juega un papel importante. No todas las personas tienen la misma facilidad para ganar peso o la misma capacidad para perderlo, incluso con dietas similares.

· Factores hormonales: Desequilibrios hormonales, como los relacionados con la tiroides o el síndrome de ovario poliquístico, pueden influir.

· Sueño: La falta crónica de sueño altera las hormonas reguladoras del apetito (leptina y grelina), lo que puede llevar a un aumento de la ingesta calórica y al aumento de peso.

· Estrés y emociones: El estrés crónico y las emociones negativas pueden llevar a comer en exceso como mecanismo de afrontamiento, lo que se conoce como "comer emocional".

· Medicamentos: Algunos medicamentos (antidepresivos, corticoides, etc.) pueden tener como efecto secundario el aumento de peso.

· Disruptores endocrinos: Ciertos químicos presentes en el medio ambiente (pesticidas, plásticos) pueden actuar como "obesógenos", alterando el metabolismo y promoviendo el almacenamiento de grasa.

  Microbiota intestinal: La composición de las bacterias en el intestino grueso (microbiota) puede influir en la forma en que el cuerpo absorbe nutrientes y almacena grasa.

En resumen, la importancia de la obesidad radica en su complejidad como enfermedad, su papel central en el desarrollo de numerosas afecciones crónicas y su impacto devastador en la salud individual y pública a nivel global. Abordarla requiere un enfoque integral que vaya más allá de la simple dieta y el ejercicio, considerando todos los factores que contribuyen a su desarrollo.

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario