10 de marzo: Día Mundial del Riñón
LA DESHIDRATACION PODRIA
CAUSARTE CALCULOS RENALES
Los
cálculos renales son depósitos duros, que varían en tamaño, pueden formarse
cuando el líquido, los minerales y los ácidos contenidos en la orina están
desequilibrados.
Los
minerales pueden cristalizarse, pegarse y solidificarse, dando como resultado
un cálculo renal.
Si
tu médico sospecha que tienes un cálculo renal, es posible que te recomiende
beber muchos líquidos para ayudar a que desaparezca por sí solo.
La
eliminación de cálculos renales en la orina puede ser extremadamente dolorosa,
pero por lo general no causan daños permanentes.
“Sin
embargo, si el cálculo es demasiado grande para expulsarlo por sí solo, este
puede provocar fiebre, náuseas o vómitos, y es necesario y urgente buscar a tu
médico”, explicó la doctora Mónica Morgan, uróloga certificada por la junta del
Hospital Houston Methodist, especializada en cirugía mínimamente invasiva y
litiasis.
TIPOS DE CALCULOS RENALES
Los
cálculos renales pueden tener más de un tipo de cristal y pueden ser una
combinación de compuestos de calcio. Los más comunes son los cálculos de
calcio. Otros tipos incluyen cálculos de ácido úrico, cálculos de estruvita
(casi siempre como resultado de infecciones del tracto urinario) y cálculos de
cistina, que pueden darse en familias.
“Analizar
los tipos de cristales en un cálculo renal nos ayuda a encontrar el mejor
enfoque para prevenir los cálculos renales en el futuro”, explicó la doctora
Morgan.
Factores
de riesgo: La deshidratación es una causa común de cálculos renales. Hacer
cambios simples en el estilo de vida, como beber más líquidos, especialmente
agua, puede ayudar a prevenirlos. Tu orina debe aparecer de color amarillo muy
claro o casi transparente. La orina más oscura puede significar que estás
deshidratado, lo que puede aumentar el riesgo de cálculos renales.
Asegúrate
de hablar con tu médico sobre la cantidad de líquidos que debes beber todos los
días. Otros factores de riesgo para los cálculos renales incluyen diabetes,
obesidad, dieta y antecedentes familiares.
Diagnóstico
y tratamiento: Tu médico puede recomendarte una tomografía computarizada
para detectar cálculos renales. Esta prueba de imágenes puede mostrar si tienes
uno o más cálculos, el tamaño y la ubicación. Si los cálculos renales son
demasiado grandes para expulsarlos por sí solos, las opciones de tratamiento
incluyen:
Litotricia
extracorpórea por ondas de choque: este procedimiento común e indoloro
utiliza ondas de choque para romper los cálculos en pedazos diminutos que se
pueden expulsar.
Ureteroscopia:
se introduce un pequeño instrumento (ureteroscopio) en el uréter a través de la
vejiga y se dirige energía láser a través del endoscopio para romper el cálculo.
Nefrolitotomía
percutánea: para cálculos muy grandes o cuando los tratamientos menos
invasivos no son efectivos, el cálculo puede extraerse a través de una pequeña
incisión en la espalda. “Una vez que se elimina el cálculo renal, podemos hacer
un seguimiento con análisis de orina para verificar la cantidad que está
pasando, el pH y los niveles de minerales en esta”, explicó.
“Es
posible que necesites un ciclo de antibióticos si hay una infección presente.
Además, se recomienda seguimiento con un equipo multidisciplinario como es el
cirujano, un dietista y un nefrólogo, los que te enseñarán formas para prevenir
los cálculos renales en el futuro”, concluyó.