4 de febrero: Día Mundial de Lucha contra el
Cáncer
NUEVAS OPCIONES TERAPEUTICAS
PARA CANCER
DE MAMA CON MUTACIONES
GENETICAS
Recientemente
se informó de los resultados positivos que arrojó el ensayo OlympiA, un estudio
global de fase III que evalúa los beneficios y efectos secundarios de tratar a
pacientes con mutaciones hereditarias de BRCA y cáncer de mama HER2 negativo en
estadio temprano de alto riesgo con un inhibidor de un tipo específico de vía
de reparación del ADN llamado inhibidor de PARP.
Los
pacientes que participaron en este estudio habían completado procesos de
quimioterapia estándar, cirugía y radioterapia, de acuerdo con dichos informes.
Al
respecto, el doctor Charles Geyer, subdirector del Centro Oncológico del
Hospital Houston Methodist y uno de los líderes del estudio OlympiA, explicó
que, “los pacientes que habían completado los tratamientos estándar (cirugía,
quimioterapia, radiación y habían comenzado la terapia hormonal) para cáncer de
mama HER2 negativo de alto riesgo, se les ofreció la oportunidad de participar
en el estudio en el que tomaron el fármaco de investigación, olaparib, o un
placebo durante un año para ver si su riesgo de recurrencia del cáncer podía
reducirse sustancialmente”.
En
el estudio participaron mil 831 pacientes de 23 países, de los cuales el 3% de
la población era hispana. Tres años después de comenzar la medicación del
estudio, el 23% de los pacientes que tomaron el placebo habían desarrollado
recurrencia del cáncer, pero ese número se redujo en un 9% a 14% absoluto en
los pacientes que recibieron olaparib, lo que proporcionó una reducción
sustancial del riesgo de reaparición del cáncer.
Explicó
el doctor que “este estudio fue diseñado para estudiar específicamente el
fármaco en mujeres y hombres con una mutación hereditaria en su gen BRCA 1 o
BRCA 2. Esta mutación las coloca en alto riesgo de desarrollar cáncer de mama,
ovario y otros cánceres a una edad temprana. Cuando se desarrollan cánceres en
estos pacientes, los cánceres dependen en gran medida de una vía de reparación
del ADN de respaldo que requiere una proteína PARP activa”
“Si
esa vía es bloqueada por un inhibidor de PARP como olaparib, las células
cancerosas comienzan a morir mientras las células normales continúan viviendo.
Lo que hizo que OlympiA fuera un desafío fue el hecho de que las pacientes
participantes debían haber tenido un cáncer de mama negativo para HER2 de alto
riesgo, así como una mutación de BRCA en la línea germinal, que es una
combinación relativamente rara. Tuvimos que reclutar personas de todo el mundo
para completar un estudio de más de 1800 pacientes”.
Para
concluir, el doctor Geyer señaló que el tratamiento utilizado en OlympiA, “ya
está aprobado en mujeres con cáncer de mama metastásico HER2 negativo, pero en
esa situación no es un tratamiento curativo. La esperanza en OlympiA es que la
terapia resulte en la curación de más mujeres con cáncer de mama temprano con
la adición de olaparib”.